martes, 9 de marzo de 2010
El dolor envuelve mi alma,
ese cruel dolor que ahora siento,
se siente un lento palpitar
de un corazón maltrecho.
Siento unas ganas de gritar,
de reclamar por este dolor que siento,
este horrible dolor que me quema por dentro
y llena mi alma de tristeza y desaliento.
Mis ojos se llenan de lágrimas,
lagrimas saladas que caen poco a poco
acompañando un llanto, un triste llanto
que al sentirse en cada rincón de mi alma
solo deja heridas sin esperanza de cicatrización.
En este momento siento
que una parte de mí se está muriendo
al sentir que de mi te alejas,
demostrándome que al ignorarme
carezco de importancia en tu corazón.
0 Comments:
Post a Comment